Apuntes sobre Luis María Pescetti

1) Ayer a la tarde, fui con unos amigos a ver a Luis María Pescetti en el Ateneo.
2) Se me ocurre que el teatro -o espectáculos en general- para chicos tiene una gran dificultad: los pibes no disimulan. Si el show no les gusta, lo boicotean y los padres no pueden detener a una horda furiosa y aburrida. Ayer, Pescetti y su guitarra hicieron que 200 pibes y sus adultos a cargo pasaran un buen rato.
3) En una entrevista que le hice en octubre de 2004 para la revista Ñ, Pescetti me dijo: "Cuando me subo a un escenario, no soy ese tío bueno que dice: ‘Hola amiguitos.Estoy muy contento de estar acá’. Suelo largar cosas como:‘Seguridad: saque a este público de porquería del teatro’. Juego a pelearme con ellos,a fastidiarme, como ellos hacen con los adultos”. Quizá ese pequeño maltrato -que no llega a ser tal- es el gran acierto de Pescetti, además de sus canciones y juegos. El tipo no es complaciente. Y tal vez a los pibes les entusiasme no ser por un rato los reyes del universo, como en casa.
4) Es excelente la canción Bien nada, sobre las respuesta monosilábicas de los hijos a sus madres, preocupadísimas por saber qué hicieron en todo el día. Acá la podés escuchar.


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Para que los chicos oigan
"Todos estamos cansados de los roles"

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