La belleza convulsa, de Paco Umbral

Tengo la costumbre de rayar los libros sin escrúpulos. De hacer anotaciones, observaciones tontas y subrayar frases que me parecen inteligentes. Hace un tiempo, leí "La belleza convulsa", de Francisco Umbral. Aquí van algunas cosas que, en ese momento, me llamaron la atención.

...luego me he duchado muy despacio, como siempre, despegándome el cuerpo de mi cuerpo. Lo que hay que dejar que se lleve el agua no es la suciedad que uno no tiene, naturalmente, sino el cuerpo de la noche, en cuyo hueco nos situará el día un cuerpo nuevo.

La prosa periodística es una prosa privada de la sintaxis interior, poética, en beneficio de la sintaxis de la noticia.

Todo -hasta el genio- es cuestión de insistencia.

La vida, admitámoslo de una vez, no nos deja nada, salgo una experiencia que sólo es aplicable a nosotros mismos (al "nosotros" que fuimos, ni siquiera al actual).

Uno se mete en la cama, a veces, a media tarde, para morir, aunque sepa que luego va a despertar.

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