Não posso viver sem ti

Leí la placa una y otra vez. Me pareció una historia hermosa. Este fin de semana, estuve en la villa portuguesa de Cascais; en esa bellísima bahía, está la Boca do inferno, una cueva hecha por el mar en las rocas.

La placa en cuestión cuenta que en ese lugar el mago inglés Aleister Crowley simuló su suicidio para asustar y demostrarle amor a su compañera, la Mujer Escarlata. Para hacer el hecho más real, en septiembre de 1930, publicó la noticia en el Diario Do Noticias y en el periódico Noticias Ilustrado, con la complicidad de dos amigos: Fernando Pessoa y Augusto Ferreira Gomes.

El texto de la placa dice: "No puedo vivir sin ti, la otra boca del infierno me agarrará, no será tan caliente como la tuya".

Claro que después de leer el texto es inevitable acercarse a ese lugar. Poner la cara para que el mar escupa una llovizna. Tener, inevitablemente, la sensación de humedad que tuvo el poeta.

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