Triple hijoeputa

-Horrible horrible. Eres horrible. Me pagarás toditas las que me has hecho.
-(...)
-No me digas "mi negra". No seré más tu negra, marico de mierda. Y vete ya a la mierda, triple hijoeputa (cuelga el celular).
Conversación escuchada en un colectivo en Bogotá. Si escuchar fragmentos de charlas en la vía pública es una actividad interesante, hacerlo en un país diferente y oír una historia de (des)amor se convierte ya en un banquete. Me quedo con el triple hijoeputa. Me parece un insulto mucho más bello que nuestro hijo de mil putas. Las mil putas la transforman en infinitas putas y uno pierde la dimensión. En cambio, triple hijoeputa es más visible, más hiriente. Y, por ende, mejor insulto.
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